Diario Venecia (Italia) – Abril 2018: Día 1: Gran Canal, Paseo en góndola, Plaza San Marco

VENECIA- RELATO DE VIAJE: PARTE I/IV

DIA 1: DOMINGO 8 ABRIL 2018: MADRID –  VENECIA

Teníamos pendiente hacía tiempo una visita a La Serenísima, la mítica ciudad de los canales. Fue nuestro primer viaje al extranjero con nuestra bebé, que por entonces tenía 6 meses.

Hacer el viaje en Abril, fuera de las fechas de Semana Santa, nos permitió conocer la ciudad en temporada más o menos baja. Creemos que debe cambiar mucho la percepción de la ciudad llena hasta los topes de turistas, así que es buena idea tratar de evitar los meses de verano para conocerla.

Respecto a si es adecuado visitar Venecia con bebés o niños, por el tema del carrito de paseo, nosotros no hemos tenido problema. Llevamos una mochila portabebés, muy cómoda para sitios con mucha gente o para evitar subir y bajar los puentes, pero también la niña pasa más calor.  Los últimos días usamos el carrito de paseo y se puede hacer perfectamente también, así que si tienes dudas de si ir o no a Venecia con bebé o niño, nosotros os recomendamos totalmente a animaros a hacerlo.

Desde nuestro punto de vista, es la ciudad más bonita que hemos visto hasta la fecha. 

Llegamos al aeropuerto de Venecia en un vuelo de Iberia: Madrid (MAD): 12:20  /   Venecia (VCE): 14:45.

Para ir del aeropuerto de Marco Polo a Piazzale Roma (lugar de donde parten los vaporettos que recorren el Gran Canal) hay un par de opciones recomendables:

Esta última fue la opción que cogimos nosotros. Se puede coger previamente por Internet o coger el billete allí mismo. La parada está bien indicada, nada más salir de la terminal. Si tienes dudas, en la web hay un vídeo sobre cómo llegar a la parada.

Una vez en Piazzale Roma, lo normal es coger un vaporetto que te acerque hasta la zona de tu hotel. Nosotros nos alojamos en el barrio de Canareggio, una de las zonas más auténticas de Venecia. Concretamente, en el Hotel Alloggi Santa Sofía. Dentro de una ciudad como Venecia donde los hoteles son carísimos, éste era de los más asequibles (125€/noche). Está muy bien ubicado, en una zona llena de restaurantes y a un cómodo paseo de 15 minutos hasta Piazza San Marcos. En el precio, se incluye un pequeño desayuno.

Para llegar allí, cogimos el Ferry 1 desde Piazzale Roma – Muelle D (en este lugar hay varios muelles cada uno identificado con una letra A, B … G) hasta la parada Ca’ D’Oro. El trayecto hasta allí dura 15 minutos y sirve como primera toma de contacto con el Gran Canal, así como los magníficos puentes, palacios, edificios e iglesias que se asoman al mismo:

Gran Canal , Venecia, Italia
Gran Canal , Venecia, Italia

  Fondaco dei Turchi, hoy en día es el Museo de Historia Natural, aunque debe su nombre a que era la sede de los comerciantes turcos en la ciudad:

Fondaco dei Turchi, Venecia, Italia
Fondaco dei Turchi, Venecia, Italia

Iglesia de San Stae (San Eustaquio), cuya fachada principal da al Gran Canal, y se encuentra bellamente decorada:

Iglesia de San Stae, Venecia, Italia
Iglesia de San Stae, Venecia, Italia

Otro de los edificios que llaman la atención es el   Casino, el cual es ni más ni menos, el más antiguo del mundo (1638):

Casino, Venecia, Italia
Casino, Venecia, Italia

La parada de nuestro hotel, justamente era la de uno de los palacios más bonitos que dan al Gran Canal, el  Palazzo Ca D’Oro. De estilo gótico tardío, fue comenzado a construir en 1442. Actualmente es un museo de arte, aunque lo más bonito es la fachada, cuyo estilo fue muy imitada en el resto de palacios: 

Palazzo Ca Doro, Venecia, Italia
Palazzo Ca Doro, Venecia, Italia

Una vez llegados al hotel, y tras un rápido check-in, aprovechamos que hacía una tarde magnífica para intentar localizar algún puesto de góndolas donde dar un pequeño paseo por los canales. El hotel se encuentra en un callejón de la animada calle principal Strada Nova, y en seguida llegamos a Campo Santi Apostoli, una plaza muy bonita, donde destaca el espigado  campanario de la Iglesia de los Santos Apóstoles:

Iglesia de los Santos Apostoles, Venecia, Italia
Iglesia de los Santos Apostoles, Venecia, Italia

Siguiendo recto el trazado de las calles de esta animada zona, llegamos hasta el Ponte de L’Ogio. Allí hay una parada de góndolas (80€, 30′ duración). Sí, es muy caro, pero también pensamos que era algo que haríamos una vez en la vida, y el hecho de hacerlo con Marina tan pequeña es un recuerdo que nos quedará para siempre. En seguida, se sale al Gran Canal, y tuvimos la primera visión del precioso Puente de Rialto:

Puente Rialto, Venecia, Italia
Puente Rialto, Venecia, Italia

Las góndolas son bastante espaciosas y están ricamente decoradas:

Gondola, Venecia, Italia
Gondola, Venecia, Italia

Por suerte no había mucho tráfico de góndolas por los canales:

Gondola, Venecia, Italia
Gondola, Venecia, Italia

y nos permitió disfrutar del espectacular Gran Canal:

Gran Canal, Venecia, Italia
Gran Canal, Venecia, Italia

Tomando la góndola en el lugar que os hemos comentado (totalmente improvisado), nos permitió pasar por las casas de dos de los habitantes más famosos de Venecia: Casanova y Marco Polo

 Casa de Giacomo Casanova, una de las casas donde vivió el famoso escritor (y seductor) veneciano, o como dijo nuestro gondolieri «playboy veneciano»:

Casa de Casanova, Venecia, Italia
Casa de Casanova, Venecia, Italia
Gondola, Venecia, Italia
Gondola, Venecia, Italia

 Casa de Marco Polo, el famosísimo mercader y viajero veneciano (S. XIII):

Casa de Marco Polo, Venecia, Italia
Casa de Marco Polo, Venecia, Italia
Gondola, Venecia, Italia
Gondola, Venecia, Italia

Ya en tierra firme, seguimos descubriendo esta maravillosa ciudad:

Salizzada Pio X , Venecia, Italia
Salizzada Pio X , Venecia, Italia

Nuestra siguiente parada fue el Puente de Rialto (S. XVI),  uno de los más famosos del mundo, donde se tienen vistas al Gran Canal:

Gran Canal, Venecia, Italia
Gran Canal, Venecia, Italia
Puente Rialto, Venecia, Italia
Puente Rialto, Venecia, Italia

Callejeando hasta la mítica Piazza San Marco, nos acercamos hasta la zona de Barcino Orseolo, muy fotogénica, pero repleta de gondoleros y turistas. Os recomendamos coger la góndola en otro sitio si no queréis ir tropezando con el resto de la gente:

Bacino Orseolo, Venecia, Italia
Bacino Orseolo, Venecia, Italia

Finalmente llegamos a la mítica  Piazza San Marco,  o“El salón más elegante de Europa” como lo definió Napoleón Bonaparte. Hay numerosos monumentos de interés en esta plaza:

Campanile, campanario independiente a la Basílica de San Marcos, a la que pertenece. Tiene casi 100 metros de altura:

Campanile, Venecia, Italia
Campanile, Venecia, Italia

Basílica de San Marcos, el principal templo católico de la ciudad  (S. XI) y obra maestra del arte bizantino. No os la podéis perder por dentro, es de las más bonitas del mundo (y además gratuita):

Basilica San Marco, Venecia, Italia
Basilica San Marco, Venecia, Italia
Basilica de San Marco, Venecia, Italia
Basilica de San Marco, Venecia, Italia

Torre dell’Orologio, bonita torre que alberga el reloj de San Marcos:

Torre dell Orologio, Venecia, Italia

Otra de las visitas imprescindibles de la ciudad es el espectacular   Palazzo Ducal. Data del S. XI, y fue residencia de los dux (magistrados supremos de la República de Venecia) así como sede del gobierno, corte de justicia y también prisión. Os recomendamos visitar el increíble interior y sus suntuosas salas repletas de arte por los cuatro costados:

Palazzo Ducal, Venecia, Italia
Palazzo Ducal, Venecia, Italia

Otros edificios visitables que se ubican en la plaza son el Museo Correr (Museo de Historia de la ciudad), el Museo Arqueólogico Nacional y la Biblioteca Nacional Marciana, comunicados entre sí.

No menos destacables son algunos encantadores cafés que salpican la plaza. No son aptos para todos los públicos (16€ un café), eso sí: camareros con traje y pajarita, pianista en directo y una de las mejores vistas del mundo. Los más conocidos son el  Café Florian y el Café Quadri:

Cafe Florian, Venecia, Italia
Cafe Florian, Venecia, Italia
 
Cafe Quadri, Venecia, Italia
Cafe Quadri, Venecia, Italia

Abandonando la plaza, aún queda otro monumento, la Columna de San Marco y San Teodoro, ubicadas en el lugar que ocupaba el patíbulo público durante la Edad Media:

Columna de San Marco y San Teodoro, Venecia, Italia
Columna de San Marco y San Teodoro, Venecia, Italia

Otra de las visitas estrellas de la zona es el Puente de los Suspiros, llamado así, ya que los presos que estaban en la prisión del Palacio Ducal e iban camino de ser ajusticiados, suspiraban al vez por última vez el cielo y el mar:

Puente de los Suspiros, Venecia, Italia
Puente de los Suspiros, Venecia, Italia

Si te acercas al agua, te verás recompensado con otra de las estampas más bonitas de Venecia, las góndolas con la Isla de San Giorgio Maggiore al fondo, dominada por laIglesia de San Giorgio Maggiore:

San Giorgio Maggiore, Venecia, Italia
San Giorgio Maggiore, Venecia, Italia
San Giorgio Maggiore, Venecia, Italia
San Giorgio Maggiore, Venecia, Italia

Deambulamos sin rumbo fijo y contemplamos varias iglesias y hoteles con encanto:

Iglesia San Giorgio dei Greci, una bonita iglesia ortodoxa con torre inclinada, ubicada en el barrio de Castello:Iglesia San Giorgio dei Greci, Venecia, Italia

Iglesia San Giorgio dei Greci, Venecia, Italia  Hotel Liassidi Palace, en una bonita zona, con restaurantes y terrazas que daban al canal:

Hotel Liassidi Palace, Venecia, Italia
Hotel Liassidi Palace, Venecia, Italia

Iglesia de Santa Maria Formosa, a la cual volvimos varias veces más a lo largo de los días. En su interior alberga obras de gran valor artístico:

Iglesia de Santa Maria Formosa, Venecia, Italia
Iglesia de Santa Maria Formosa, Venecia, Italia

Intentamos cenar en la Osteria La Bottega ai Promessi Sposi (Calle dell’Oca, 4367), pero hechizados por el encanto de la ciudad, llegamos demasiado tarde (20:30) y no tenían mesa, así que acabamos cenando muy cerquita del hotel, en Al Vechi Bragosso (Strada Nova, 4386), donde cenamos bastante bien para haber improvisado el sitio. 

 

Publicado por

fmarquezarroyo

Nací en la genial cosecha de 1981. Soy el planificador de la pareja (quizás tenga que ver que soy Informático y algo cuadriculado). Me gusta llevar todo bien atado para evitar sorpresas. Soy bastante robótico cuando salgo de viaje: puedo dormir pocas horas, no sentir las inclemencias del tiempo o patear muchos kilómetros, con tal de no dejarme cosas sin ver. No me gusta repetir ciudades con tantos sitios por descubrir... Cuando no estoy pensando en viajes (vivo en un wanderlust contínuo), me gusta ir al gimnasio, leer (fantasía y ciencia ficción, sobre todo) y jugar a las cartas (mus, tute, poker ... no por nada me llaman Timbas).

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